LA INDUSTRIA MUSICAL ECUATORIANA DEBE SER DECLARADA EN EMERGENCIA!
PUES EN REALIDAD NI SIQUIERA EXISTE...
Art. 22.- Las personas tienen derecho a desarrollar su capacidad creativa, al ejercicio digno y sostenido de las actividades culturales y artísticas, y a beneficiarse de la protección de los derechos morales y patrimoniales que les correspondan por las producciones científicas, literarias o artísticas de su autoría.
Art. 33.- El trabajo es un derecho y un deber social, y un derecho económico, fuente de realización personal y base de la economía. El Estado garantizará a las personas trabajadoras el pleno respeto a su dignidad, una vida decorosa, remuneraciones y retribuciones justas y el desempeño de un trabajo saludable y libremente escogido o aceptado.
Art. 381: El sistema nacional de cultura tiene como finalidad fortalecer la identidad nacional; proteger y promover la diversidad de las expresiones culturales; incentivar la libre creación artística y la producción, difusión , distribución y disfrute de bienes y servicios culturales; y salvaguardar la memoria social y el patrimonio cultural. Se garantiza el ejercicio pleno de los derechos culturales.
Art. 380: (numeral 3): Asegurar que los circuitos de distribución, exhibición pública y difusión masiva no condicionen ni restrinjan la independencia de los creadores, ni el acceso del público a la creación cultural y artística nacional independiente.
Reflexión: El desarrollo de la capacidad creativa en la vida de un músico solo puede verse estimulado y fomentado gracias a un respeto en su libertad de expresión y en la seguridad económica que le brinde el ejercicio digno de su trabajo en relación con sus derechos constitucionales.
El sistema actual de radios viola esto al limitar las diversas formas de expresión creativa, al ajustarse solo a estándares y parámetros comerciales en beneficio de sus auspiciantes. Buscando el propósito de la necesaria difusión, el músico local está obligado, para intentar conseguir un espacio en la rotación nacional, adaptarse a estas fórmulas o estándares, que generalmente en la actualidad siguen una sola tendencia, discriminando las distintas alternativas.
El actual sistema de radio condena el derecho al trabajo de un músico, pues la difusión es su principal recurso para dar a conocer su obra y entablar una relación comercial con sus futuros consumidores. En la actualidad no existe una ley que obligue a las radios nacionales a promover en igualdad de condiciones y de manera obligatoria el talento nacional , debido a esto centenares de músicos a lo largo de la historia han desechado sus sueños de ejercer esta profesión de manera libre y se ha regado la famosa frase ¨De músico te mueres de hambre¨, pues las radios usan las frecuencias de todos nosotros para promover únicamente música que satisfaga los intereses comerciales de sus auspiciantes en perjuicio de la libre creación artística nacional teniendo cabida solo aquellos músicos dispuestos a seguir al pie de la letra las modas o estándares comerciales que en su mayoría son gente del mercado musical extranjero.
El actual sistema de radio que en su afán de lucrar lo más posible y en dependencia de las exigencias comerciales de sus auspiciantes limitan la diversidad de las expresiones culturales al escoger solo las tendencias de moda (o fórmulas comerciales) que dictan disqueras internacionales y que en su gran mayoría son de un contenido vacío o superficial, esto a su vez desmoraliza cualquier intento de libre creación artística y su consiguiente intento de difundir, distribuir y disfrutar de ello. Pues sin difusión un artista esta condenado a arar en el olvido cometiéndose así un severo atentado al desarrollo cultural del país.
viernes, 19 de diciembre de 2008
LA RED PIRATA: DISQUERAS + RADIOS ECUATORIANAS (EL COMPLOT)
Antecedentes
Los músicos ecuatorianos estamos condenados a rogar por un espacio en las radios actuales, quienes casi siempre nos someten a dar algo a cambio para que nos puedan rotar regularmente o al menos dignamente. Es normal que la programación radial de hoy fomente y promocione música extranjera en su gran mayoría, negándonos así el derecho a los músicos locales de difundir nuestra obra, recurso vital para poder vivir de ésta profesión y violando así nuestro derecho constitucional al trabajo, pues aunque la sociedad en su gran mayoría se haya acostumbrado a decir “ De músico te mueres de hambre los músicos de esta nueva generación estamos decididos a acabar con ésta maldición que está destruyendo la cultura musical del Ecuador y gritar ¨Ser músico también es un trabajo!¨.
¿Como afecta el actual sistema radial a la mayoría de músicos locales?
Existe un desbalance tremendo que favorece notablemente a músicos extranjeros quienes obtienen una promoción superior a la de los músicos locales. Esto debido a que cuentan con una maquinaria publicitaria que pisotea en su gran mayoría cualquier intento de promoción del artista nacional, pues con que dinero podría un músico local aparte de invertir en la grabación de su música pagar también una promoción en radios, ya sea con coimas, regalos, promociones, etc. La realidad nacional nos dice que nuestros músicos ya son lo bastante heroicos al lograr realizar un material de calidad decente dentro de una sociedad que prácticamente les ha negado el derecho al trabajo , pues si aún siguen existiendo músicos en esta tierra no es precisamente porque es un trabajo rentable, sino porque es algo que habita en el alma y que presiona para ser expresado. La gran mayoría de artistas locales están marginados de poder lucrar con esta profesión porque como no pueden ser conocidos y promocionados en las radios nacionales (quienes ocupan la frecuencia radioeléctrica de todos los ecuatorianos) tienen que ir de bar en bar tocando e invirtiendo sus pocos recursos para ganar un sueldo miserable que no les permite una vida digna y un ejercicio de su profesión decente.
A su vez no existe un respeto por la diversidad de géneros musicales, que cabe decir es muy amplia, el sistema de radios actual margina cualquier intento de incluir conceptos alternativos, experimentales, diferentes, etc. Pues está acostumbrada a promocionar siempre lo que ellos denominan “La tendencia comercial” ; esto viola derechos constitucionales de los músicos como elementos fundamentales del trabajo en un Estado de derecho.
Los músicos ecuatorianos estamos condenados a rogar por un espacio en las radios actuales, quienes casi siempre nos someten a dar algo a cambio para que nos puedan rotar regularmente o al menos dignamente. Es normal que la programación radial de hoy fomente y promocione música extranjera en su gran mayoría, negándonos así el derecho a los músicos locales de difundir nuestra obra, recurso vital para poder vivir de ésta profesión y violando así nuestro derecho constitucional al trabajo, pues aunque la sociedad en su gran mayoría se haya acostumbrado a decir “ De músico te mueres de hambre los músicos de esta nueva generación estamos decididos a acabar con ésta maldición que está destruyendo la cultura musical del Ecuador y gritar ¨Ser músico también es un trabajo!¨.
¿Como afecta el actual sistema radial a la mayoría de músicos locales?
Existe un desbalance tremendo que favorece notablemente a músicos extranjeros quienes obtienen una promoción superior a la de los músicos locales. Esto debido a que cuentan con una maquinaria publicitaria que pisotea en su gran mayoría cualquier intento de promoción del artista nacional, pues con que dinero podría un músico local aparte de invertir en la grabación de su música pagar también una promoción en radios, ya sea con coimas, regalos, promociones, etc. La realidad nacional nos dice que nuestros músicos ya son lo bastante heroicos al lograr realizar un material de calidad decente dentro de una sociedad que prácticamente les ha negado el derecho al trabajo , pues si aún siguen existiendo músicos en esta tierra no es precisamente porque es un trabajo rentable, sino porque es algo que habita en el alma y que presiona para ser expresado. La gran mayoría de artistas locales están marginados de poder lucrar con esta profesión porque como no pueden ser conocidos y promocionados en las radios nacionales (quienes ocupan la frecuencia radioeléctrica de todos los ecuatorianos) tienen que ir de bar en bar tocando e invirtiendo sus pocos recursos para ganar un sueldo miserable que no les permite una vida digna y un ejercicio de su profesión decente.
A su vez no existe un respeto por la diversidad de géneros musicales, que cabe decir es muy amplia, el sistema de radios actual margina cualquier intento de incluir conceptos alternativos, experimentales, diferentes, etc. Pues está acostumbrada a promocionar siempre lo que ellos denominan “La tendencia comercial” ; esto viola derechos constitucionales de los músicos como elementos fundamentales del trabajo en un Estado de derecho.
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